Dios también sobre el cemento



Del mismo modo que la selección de fútbol tuvo su espacio en este blog de baloncesto Rafa Nadal no podía ser menos porque si histórico es ganar un mundial de fútbol, ¿qué adjetivo podría definir,entonces, el logro que el mallorquín consiguió la pasada noche?

Papel y bolígrafo en mano. Son las cuatro y cuarto de la madrugada en España. El mito se consagra. Nueva York y el mundo entero se rinden a sus pies. Rafa Nadal levanta el trofeo del Abierto de los Estados Unidos.

Ningún ángel le anunció. Tampoco había posada. Ni mula, ni buey. Nació un 3 de junio de 1986 y le pusieron por nombre Rafael... por no llamarle Hércules.

Sus brazos y piernas impresionan, pero sus triunfos se maduran entre sien y sien. Sólo Michael Jordan o Tiger Woods pueden compararse al manacorí en términos de mentalidad ganadora. Sólo ellos podrían estar entrenando una fría madrugada para mejorar. Sólo ellos se comparan a Rafa en el amor a la victoria. ¿O es temor a la derrota?

Sacrificio. Nadal creció bajo la atenta mirada de su tío. Muy pocos hubieran aceptado semejante régimen disciplinar. Muy pocos hubieran aprendido el sentido de la palabra respeto como él lo ha hecho.

Respeto al oponente y al deporte. Nunca un mal gesto, nunca una raqueta volando por el aire, siempre una mano arriba pidiendo perdón por algún golpe de fortuna.

Con su victoria en el US Open de 2010, con sólo 24 años, Rafael Nadal Parera se introduce en una élite reducida de jugadores que han conseguido los cuatro torneos del Grand Slam. Lo ha hecho compartiendo época y batallas con el más grande hasta la fecha.

Roger Federer sabe que el testigo está en buenas manos. Él ha puesto la cifra a batir (16 majors), pero sabe que tal vez no sea suficiente. Si las lesiones le respetan el mejor embajador de nuestro país y de sus valores rebasará los récords del suizo para erigirse como el mejor tenista de la historia y uno de los cinco mejores deportistas de siempre.

Michael (Jordan), Roger (Federer), Carl (Lewis), Michael (Phelps) y demás genios, id haciendo hueco. Viene Rafa.

UN ABRAZO Y... ¡VAMOS RAFA!

1 comentarios:

Tòfol Ferriol dijo...

Amén Amigo!
Ya sabes que a mi Rafa Nadal no me gusta mucho como persona (siempre nos pasa lo mismo con los Mallorquines, es una tara que todos tenemos que cargar), pero como tenista, es un puñetero crack. Me debo rendir a sus pies, i mas viendo el partido de ayer. Vaya dos raquetas, vaya dos cracks, aunque Rafa, vuela por encima de todos. Ya habia escrito su nombre en la historia, ahora lo subraya, i a la proxima, lo tendran que poner en relieve, porque vaya crac.
Que dure mucho tiempo.

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